CIUDAD DE MÉXICO.- Amigos de Andrés López Beltrán, obtuvieron contratos millonarios con el gobierno federal, amparados por el influyentismo, mientras comparten aficiones, viajes y negocios con el vástago de Andrés Manuel López Obrador, de acuerdo con un reportaje presentado por el periodista Carlos Loret de Mola en su programa de Latinus.
La investigación revela que los amigos de fiesta de López Beltrán cerraron contratos para proyectos que se construyen en los terrenos del Parque Ecológico Lago de Texcoco, donde se iba a construir el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAIM).
De esta forma se vieron beneficiados por la cancelación de la obra magna del sexenio anterior.
Entre las empresas que han obtenido beneficios se encuentra Organismo Promotor Logístico, administrada por Carlos Buentello Carbonell y apoderado por Eduardo Rafel Castro Ávila, medio hermano de Alejandro Castro Jiménez Labora, amigo de López Beltrán.
El reportaje también revela que de la mano Román Meyer, los amigos de López Beltrán participan en el proyecto del Archivo General Agrario que se levanta en la avenida Juárez en el Centro de la Ciudad de México, donde la empresa Organismo Promotor Logístico recibió un contrato por 56 millones de pesos en 2022.
Además, se señala que Alejandro Castro Jiménez Labora y su primo, Santiago Jiménez Labora, hacen uso de otras empresas para colocar mobiliario en los edificios de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
De igual forma se menciona al despacho NA Colectivo Sodio, el cual ha trabajado en proyectos para Chocolates Rocío, propiedad de los hijos del presidente López Obrador, así como otras marcas relacionadas con los amigos de López Beltrán.
Revela igual, que la empresa controlada por amigos del presidente, AZ Gerencia de Proyectos, recibió un contrato por 17.5 millones de pesos para supervisar las obras de la etapa cuatro del malecón del Río Grijalva, proyecto que realizó la Sedatu y en el cual Alejandro Castro Jiménez Labora fue nombrado proyectista.
El reportaje explica que el Nuevo Aeropuerto Internacional de México en Texcoco fue cancelado en diciembre de 2018 debido a la consulta nacional promovida por el presidente López Obrador. Después de su cancelación, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) gastó 221 millones de pesos en 44 estudios de factibilidad para la “rehabilitación y rescate del lago de Texcoco”.